la fiesta del "Buen pastor"

La semana pasada todos los fieles laicos celebramos la fiesta del “Buen Pastor”, y así mismo celebramos la jornada mundial por las vocaciones sacerdotales, con el fin de motivar a los sacerdotes para que con sus homilías dominicales, puedan hacer una reflexión del texto del buen pastor a la luz de las vocaciones sacerdotales, e invitar a toda la comunidad a orar por ellas.

Ya que el Señor nos llama a todos a participar solidariamente de su vida y destino. Nadie está excluido de esta llamada. Por eso quiere asegurar en su Iglesia la presencia de hombres, que sean signos y testimonio de esta relación íntima que anhela tener con cada uno de nosotros.

Al orar por las vocaciones, especialmente sacerdotales y a la vida consagrada, estamos orando por nosotros mismos y por toda la Iglesia, pidiéndole al Señor que nos regale testimonios vivos de lo que significa oír su voz y seguirlo y recibir de él vida eterna, que nos llena de alegría.

También pedimos lavar nuestros pecados en la sangre del Cordero y la gracia de oír su voz, reconocerla y seguirla toda nuestra vida.